
Ahi viene ese viento gris, soplo de nube turbia que me enegrece la vista con su angustiosa impaciencia. Aires de luto en un desesperanzador ambiente hacen crecer la sombría espera. Viento, ten cuidado que aquí todo es frágil y sin vida. Corazones y sentires suelen estar, aquí, en detención o retroceso involuntario, de sus labios secos no arranca palabra alguna, afuera todo está peor.Ya viste, tu garganta es usada como el violín de una gris melodía poco cálida y tú no te quejas, porque te gusta ver volar las negras mariposas de tus lágrimas.
A partir de ahora, nunca más te verás reflejado en los ojos de un ángel ni sabrás lo que es tocar el cielo. A partir de ahora empieza tu condena y no tienes permitido mirar hacia atrás, jamás.